Del Proyecto de Educación Popular y Geografía del Programa Kioscos Socioambientales y la Escuela de Geografía.

Por Mauricio Alvarez Mora y Cristopher Pérez Núñez

A dos años del violento e impune asesinato del líder indígena Bribri, Sergio Rojas Ortiz, un grupo de activistas y organizaciones sociales y académicas estamos caminado bajo el lema: Contra la impunidad y el olvido.

El denominador común y el centro de la iniciativa fue el Dr. Marcos Guevara, quien meses antes de su partida física nos fue hilando y tratando de articular frente al grave peligro que representa el monstruo de la impunidad, que ha crecido descontroladamente conforme las comunidades más olvidadas del país se han levantado y alzado su voz para exigir el respeto de sus derechos.

Si no sabíamos cuan racista es el Estado y parte de la sociedad costarricense, fue debido a que estas comunidades se encontraban silenciadas por gruesas capas de injusticias que no las dejaban expresar su legítimo derecho a ser y estar, según sus propias formas, realidades y paradigmas. Era tan evidente que estaban invisibilizadas, que cuando decidieron salir a la luz la respuesta inmediata fue la violencia generalizada y cruel con que han asesinado a sus líderes y atacado sus procesos de autonomía territorial.

Podrán decir que estas comunidades tienen en la ley los derechos y los territorios, pero en la práctica vivían como inquilinos arrimados en las esquinas de los que ya eran rincones del país. Excluidos, en zonas montañosas, que ya de por sí son poco aptas para la agricultura, se les fue despojando y arrinconando cada vez más. Sin embargo, cuando trataron de hacer valer lo que decía en la ley, la respuesta fue brutal, al tiempo que el actuar del Estado se ha caracterizado por la desidia y la impunidad.

Si hay una realidad negada y que convierte en caricatura el mito democrático y el discurso patriotero del bicentenario, es la guerra de “baja intensidad” que han librado los usurpadores con gran parte del aparato estatal a su favor y con más de cinco siglos de colonialismo detrás, y que hoy por hoy se materializa en el asesinato de dos líderes, en la amenaza de muerte de catorce más y en un ciclo de violencia tan evidente y manifiesto que se hace imposible de ignorar. Quienes perpetran estos actos de violencia de la manera más vil y cruel, tienen a su favor los dispositivos estatales y mediáticos para permanecer en el anonimato ante el resto de la población; son el brazo ejecutor y el velo encubridor de ese racismo arraigado en amplios sectores de la sociedad.

Cuando se lee el discurso y se observan las acciones del gobierno, no deja de sorprender la falta de diligencia, la hipocresía y, en suma, el cinismo alrededor de la forma en la que tratan y se refieren al tema. Conocen muy bien su papel, en el sentido de tratar de proyectar un discurso que afirma su accionar, pero que en la realidad de las comunidades no tiene mayor efecto, el cual, consecuentemente, termina por legitimar, por omisión y acción, la violencia y exclusión que estas personas que vienen sufriendo de manera sistemática desde hace ya mucho tiempo.

Ante este contexto hemos decidido dar un paso al frente y sacar tiempo, esfuerzo y compromiso de dónde podamos para luchar contra la impunidad, y por darle un lugar histórico a la gran lucha de re-existencia que están dando los pueblos indígenas de Costa Rica. Muchas personas no lo saben o no lo dimensionan, pero este es quizás el movimiento socio-político más fuerte de las últimas décadas en el país, protagonizado por los pueblos indígenas.



Es por esta razón que se van a estar publicando desde diversos enfoques, voces y realidades, artículos de opinión, se realizarán foros, conferencias de prensa y otras actividades para romper el cerco de impunidad que se teje ante la autodeterminación de los pueblos originarios.

Esta iniciativa es conformada y apoyada por personas ligadas al Proyecto Educación Popular y Geografía del Programa Kioscos Socioambientales y la Escuela de Geografía UCR, Escuela de Antropología de la Universidad de Costa Rica, Espacio Universitario de Estudios Avanzados y el Centro de Investigaciones Antropológicas de la Universidad de Costa Rica, el Centro de Investigación en Cultura y Desarrollo de la Universidad Estatal a Distancia y , Cátedra Agenda Nacional de la Escuela de Ciencias Sociales del Instituto Tecnológico de Costa Rica, DITSO, Voces Nuestras, y Coordinadora de Lucha Sur-Sur.

Invitamos a todas las personas a sumarse a difundir, elaborar y proponer más acciones e iniciativas en esta línea, con el fin de combatir la impunidad y reivindicar la lucha de Sergio Rojas y Jehry Rivera, quienes pagaron con su vida la resistencia frente a este ciclo de violencia e impunidad. Además de visibilizar a las personas amenazadas de muerte en los territorios, de manera que esto sirva como un seguro de vida ante la violencia sistémica y sistemática que se ha desatado en contra de estas comunidades, y que necesariamente debemos denunciar.

Tomado de: https://semanariouniversidad.com/opinion/contra-la-impunidad-y-el-olvido-sergio-rojas-vive/?fbclid=IwAR3pH4XCyi7Nmdss4G2_FpQxHtdiXcHhTmNDw8m-6xEdZdXcSsY7EsDty7c

El conversatorio "Mujeres y luchas por la tenencia de la tierra" fue un espacio de Aula Abierta en el marco del curso "Disputas Territoriales y Socioambientales: el caso de los monocultivos en Costa Rica"

 

Pueden ver el programa completo aquí

 

 

Participa Tatiana Roa Avendaño, ambientalistas del Censat Agua Viva Colombia (AT). Ingeniera, magíster en Estudios Latinoamericanos de la Universidad Andina Simón Bolívar y doctorando en Cedla Universidad de Amstedam.

Pueden ver la conferencia completa aquí

Autor: Mauricio Álvarez Mora , Por Mauricio Álvarez Mora, proyecto ED-3526 Diálogo de Saberes y Geografía, docente Escuela de Geografía, Ciencias Políticas, Programa Kioscos Socio ambientales UCR y IDELA-UNA.

Hoy día de la tierra entra en vigor el Acuerdo de Escazú y mientras en la región celebran en nuestro país están amenazadas de muerte 12 personas de pueblos indígenas: Pablo Sibas Sibas y Robert Morales Villafuerte (Térraba); Maximiliano Torres Torres y Clarita Quiel Torres (Cabagra); Efraín Fernández Zúñiga, Carlos Antonio Zúñiga, Jason Ríos Ríos, Doris Ríos, Ariel Ríos (China Kichá); y Claudio Ortiz Rojas, Daniel Figueroa Morales, Minor Ortiz Delgado, Mariana Delgado Morales y José Enrique Ortiz Figueroa (Salitre). Además, han amenazado a dos defensores de derechos humanos de la Asociación de Iniciativas Populares Ditsö, Gustavo Oreamuno Vignet y Jeffery López Castro[1].

Estas 14 amenazas son producto de una violencia estructural, que han recibido los pueblos originarios y las personas activistas que acompañan el movimiento de recuperación de los territorios que por ley les pertenecen.

Estas intimidaciones son parte de los 88 tipos de agresiones registradas tan solo el año pasado[2], entre las que están: agresiones por parte de turbas, múltiples tipos de amenazas, amedrentamientos, hostigamientos, detonaciones de arma de fuego, incendios, bloqueos de caminos, agresiones con arma, ataques con sustancias químicas y muchas otras formas de violencia, cuyo hecho crucial fue el asesinato del dirigente indígena Jerhy Rivera, en febrero del 2020. Toda una guerra de lenta y cruel intensidad.

Para este 22 de abril Día Internacional de la Madre Tierra nos parece importante preguntarnos ¿Cuáles desafíos estamos enfrentado para su cuido? Les compartimos en estas infografías algunas de las tensiones que nos preocupan y les invitamos a reflexionar ¿Cuáles otras están presentes en sus territorios, comunidades, barrios?

Fuente: Frente Ecocipreses https://www.facebook.com/frente.ecocipreses.1

La deficiente e irregular administración de los últimos años de la ASADA de Cipreses ha agudizado la problemática del recurso hídrico en la comunidad. Todas las irregularidades administrativas han sido demostradas a través de investigaciones por parte del AyA. Desde el Frente comprendemos que el desarrollo ambiental va íntimamente ligado a una administración sana y transparente del recurso hídrico. Un mala gestión del recurso, las nacientes sobreexplotadas y violentadas en sus zonas de protección, forman el caldo de cultivo perfecto para un caos.

Los fondos públicos que administran las ASADAS son ÚNICAMENTE para velar por el abastecimiento y la continuidad del servicio a la población, así como para la protección del recurso hídrico. Mientras las nacientes se encuentran violentadas y deforestadas en sus zonas de protección y la ASADA sea administrada de manera deficiente e irregular, la crisis del recurso hídrico en Cipreses no acabará.

Con la participación de Patricia Mora: Diputada en el periodo 2014-2018, Ministra de Condición de la Mujer del 2018 al 2020, Socióloga y Profesora universitaria y Laura Martínez: Directora del Semanario Universidad, Periodista y Profesora universitaria.

Pueden ver el programa aquí.

Los pueblos indígenas vivimos sumidos y abandonados en nuestros territorios y violentados por todos los medios. Los tres poderes de este país violentan los derechos del pueblo indígena: esta Asamblea Legislativa, el Poder Judicial y el Poder Ejecutivo.

Vivimos sumisos y para sentirnos bien tenemos que callarnos, estar escondidos y no hablar. Desde el momento en que hablamos nos asesinan. Hace 40 años yo empecé esta lucha con el hermano Sergio Rojas y es una lucha muy desigual, totalmente desigual.

En las universidades se forman los procesos educativos, no hay un solo curso de derecho indígena en la Universidad de Costa Rica ni en las universidades privadas donde se forman los abogados. Es muy difícil manejar el tema indígena.

Como pueblos indígenas hemos sido reconocidos con derechos desde 1939. Tenemos una serie de jurisprudencia que no la consideran para tomar decisiones en los pueblos indígenas. Generalmente, cuando el juez toma una decisión la hace basada en la jurisprudencia que tiene a nivel nacional y no basada en los derechos que existen para los pueblos indígenas y que se han ido reconociendo.

¿Es lícito confundir la profundidad de una clase con el bienestar de un país? Eduardo Galeano

arece curioso hablar sobre la tierra en tiempos de la exacerbación tecnológica y la economía del conocimiento; sin embargo, reflexionar sobre la situación de la tierra en Costa Rica no es un asunto menor. La tierra es un bien común no renovable, que nos alberga y garantiza muchos otros (agua, bosques, biodiversidad, alimentos), que tiene un lazo intrínseco para el sostén de la vida. Por ello, resulta relevante cuestionarnos: ¿En qué situación se encuentra el uso y tenencia de la tierra?

Prosokioc