Fuente : Jairo Villegas S. en nacion.com

Una fuerte reprimenda recibió la Municipalidad de Alajuela por otorgar el permiso de construcción a una cementera, pese a que, al parecer, incumplió los requisitos.

El regaño lo hizo el Tribunal Contencioso Administrativo en la resolución número 410-2011, firmada por los jueces Silvia Consuelo Fernández Brenes y Eduardo González Segura.

El caso corresponde a la operación de Cementos David, en el distrito San Rafael de Alajuela, que funciona desde el 2010.

Según resolvió el Tribunal, ante una apelación presentada por la Asociación de Desarrollo Integral de San Rafael, el ayuntamiento otorgó el aval de construcción, pese a “vicios” de gravedad.

“Por los efectos jurídicos que produce, faculta el funcionamiento de la cementera sin existir criterio técnico que lo respalde, en grave riesgo del ambiente y salud de la población que vive en las cercanías”, dice la conclusión del fallo.

Los jueces señalaron que toda la obra se hizo con un permiso dado solo para una nave industrial y oficinas administrativas.

Incluso, el Tribunal ordenó al ayuntamiento “la clausura inmediata de las obras levantadas con grave infracción del ordenamiento urbano ambiental”.

Abierto. Aunque recibió la orden, Roberto Thompson, alcalde de Alajuela, admitió que no harán el cierre porque consideran que la cementera puede subsanar los requerimientos pendientes.

“Cuando las obras están en proceso de construcción, la ley obliga a la clausura, precisamente para que no sigan adelante. Cuando las obras están terminadas y se establece que faltaron algunos requisitos, el criterio de nuestro departamento legal es que en este caso no hay nada que clausurar”, aseguró Thompson.

El Alcalde advirtió que si la firma no cumple las exigencias, se expone a la demolición de la planta.

Por su parte, Luis Alonso Gutiérrez, quien fungió como alcalde de Alajuela cuando se otorgaron los permisos, insistió en que la cementera cumplió los trámites.

Sin embargo, Gutiérrez achacó a un error del Colegio de Ingenieros y Arquitectos el lío con el permiso de construcción.

“La empresa hizo la solicitud de permiso de construcción, presentó unos planos, la Municipalidad se fundamenta en lo que el Colegio indicó, pero el Colegio falla en el metraje y se quedó corto por 2.000 metros cuadrados, pero desde un inicio los planos que la empresa presentó contenían todas las obras”, resaltó Gutiérrez. Lo mismo apuntó Juan Diego Castro, uno de los abogados de Cementos David.

“No hay que perder de vista que, detrás de todo esto, hay un gran telón de fondo que se llama la guerra de los carteles del cemento. Los planos que se presentaron incluyen todo, no fue que se presentaron por pedazos”, aseguró Castro.

No obstante, Olman Vargas, director ejecutivo del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos, descartó que hayan errado.

“Presentaron una lámina donde estaban todos los componentes que ellos tenían, pero junto a esa lámina venían los planos de detalle solo de algunos de esos componentes”, enfatizó Vargas.

Por su parte, Erick Solano, abogado de la Asociación de Desarrollo Integral de San Rafael, anunció que acudirán a instancias judiciales para que el municipio cumpla la orden de clausura.

“El Tribunal está actuando como superior jerárquico del alcalde, y vamos para un mes de que fue notificado y la Municipalidad no ha procedido”, enfatizó Solano.