La empresa sigue funcionando desobedeciendo a Tribunal y Municipalidad

Desde principios del año los vecinos de San Antonio del Humo, Roxana y las Floridas, en Jiménez de Pococí han denunciando la corta de árboles, movimiento de tierra y siembra de piña sin los permisos ni el control ambiental correspondiente, causando un riesgo de contaminación hídrica y de suelo. Ante esta situación el diputado del Frente Amplio José María Villalta presentó una denuncia ante el Tribunal Ambiental Administrativo (TAA) el pasado 20 de febrero.

El 24 de mayo el Tribunal Ambiental resolvió (Resolución 521-12-TAA) ordenando una serie de medidas a tomar por la empresa Pequeñas Anonas Rojas PAR S.A, así como la realización de estudios e inspecciones in situ a diferentes instituciones como la Municipalidad de Pococí, el Ministerio de Agricultura y Ganadería, SETENA, entre otras.

 

El Tribunal también ordenó la paralización inmediata de “todas las actividades relacionadas con el proceso productivo del cultivo de la piña que se genera en la presunta propiedad de Armando Castillo y que aparentemente arrienda la empresa Pequeñas Anonas Rojas PAR S.A.” (Resolución 521-12-TAA).

La resolución toma en consideración el artículo 50 de la Constitución Política costarricense, que establece el derecho de toda persona a disfrutar de un ambiente sano y ecológicamente equilibrado.

Sobre el derecho al medio ambiente sano la Sala Constitucional lo describió en la sentencia 644-99 como un derecho está a lo largo de todo el ordenamiento jurídico. Además menciona su importancia en la esfera familiar, laboral y en general, todos los medios en los que se desarrolle la vida de una persona.

Por otro lado, sobre el ambiente ecológicamente equilibrado refiere al equilibrio que debe existir entre el avance de la sociedad y la conservación de los recursos naturales. Corresponde al Estado preservar, conservar y controlar todas las actividades que de alguna u otra manera puedan tener injerencia en los recursos naturales.

La resolución del Tribunal también se refiere el principio precautorio o in dubio pro natura, de conformidad con el cual “la prevención se fundamenta en la necesidad de tomar y asumir todas las medidas precautorias para evitar o contener la posible afectación del ambiente a la salud de las personas. De esta forma, en caso de que exista un riesgo grave o irreversible –o duda al respecto-, se debe adoptar una medida de precaución e inclusive posponer la actividad de que se trate.” (Resolución 2219-99, Sala Constitucional).

En la sentencia el Tribunal Ambiental establece límites relacionados con las actividades que se pueden desarrollar en las áreas de protección, a pesar de que formen parte del régimen de propiedad privada. Estas áreas poseen una gran importancia para la conservación de todos los recursos hídricos y por ello deben poseer un fin social.

Otro aspecto que se analiza es la obligación de toda persona, física o jurídica, pública o privada, de conservar los suelos de conformidad con lo establecido por la Ley Orgánica del Ambiente, con la finalidad de evitar la erosión y el desgaste de sus componentes. El cultivo de la piña que se desarrolla en una finca supuestamente arrendada por la empresa Pequeñas Anonas Rojas PAR, S.A. no presenta controles para mitigar la erosión, según la resolución del TAA. Además el documento afirma que se ha realizado la tala de varios árboles dentro del área de protección de una quebrada sin nombre.

Cerrada por segunda vez

El Concejo Municipal de Pococí decidió el 29 de febrero cerrar la finca alquilada por la empresa PARSA, la cual también maneja una piñera en África de Guácimo, en donde no ha podido expandir sus cultivos debido a la moratoria en ese cantón.

El pronunciamiento municipal (Acuerdo N° 374, articulo 1) que ordena el cierre asegura que la actividad piñera representa: “un serio perjuicio económico a las comunidades- pues se ha hecho esta sustitución de banano a piña - sin que a la fecha se haya establecido un impuesto a este nuevo producto, lo cual atenta contra uno de los más importantes impuestos de este municipio”. Según el mismo acuerdo “A nivel de empleo la actividad piñera solo genera una cuarta parte que la actividad bananera.”

El Programa Kioscos Sociambientales realizó dos giras a la comunidad en el mes de abril (ver reporte y fotos) donde se pudo ver el avance de la siembra pese al acuerdo municipal. Las giras contaron con la asistencia de miembros de la comunidades vecinas y organizaciones de Guácimo, representantes de ambas municipalidades y en compañía de estudiantes del Trabajo Comunal Universitario, así como de la Práctica de Planificación Social y Económica de la UNA.

En la segunda visita el 22 de abril (ver reporte y fotos) se pudo constar que fueron rotos los sellos de cierre municipal.

La Municipalidad de Pococí inició un proceso penal mientras al día de ayer la compañía (14 junio) tampoco obedeció la orden de cierre del Tribunal Ambiental Administrativo.

Video- reportaje en: http://www.youtube.com/watch?v=k6KGZRyJIqs&feature=plcp

Más información contactar:

Alberto Brenes, Vecino de la Florita al teléfono 27638004 ó al 8808-7163.

Guido Sanchez, Sindico propietario de Jiménez al 8995-6033.

Martin Valenciano, Asociación de Desarrollo de San luis, al 8399-3668.

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